Abstract:
El Continente latinoamericano fue evangelizado en la Fe desde el descubrimiento. Esto constituye un rasgo fundamental de identidad y unidad del Continente y, a la vez, una tarea permanente. En efecto, nuestras tierras se forjaron al calor de la fe y la Buena Nueva del Evangelio encarnado en nuestros pueblos nos congrega en una originalidad histórica cultural que llamamos América Latina. Ésta se prolonga en nuestros días en un continente que ha visto surgir una síntesis cultura mestiza en la que conviven diversas expresiones como pueblos aborígenes, afroamericanos y descendientes de europeos y asiáticos, unidos en una fe e identidad católica.