Abstract:
El ser humano de hoy vive inmerso en un tiempo que tiene como una de sus características más fuertes el paulatino olvido de la Verdad. No es raro escuchar frases tales como: "cada uno tiene su verdad", "a mí me parece bien y eso basta", "no existe una sola verdad". Expresiones que describen una realidad más de fondo y más grave: el olvido a la indiferencia de Aquel que es la Verdad (Jn 14,6) misma y única: el Señor Jesús, quien revela al hombre su identidad y su gran vocación.